9 de septiembre de 2010

Politiqueos, manejos, penurias, meneos, trebejos, curias, el paro, saqueos...

¿De qué haré, ea, mi oda?
Me como el coco insistente
por irme a un tema de moda
y no hay "uno" solamente.
Arduo es para un rapsoda,
y me doy diente con diente.
¿Si meto la pata, toda,
y resulto impertinente?
Turbada estoy, cual beoda
¿Y si digo inconveniente?
Mejor os dejo reseñas,
ideas, chismes, informes,
y vosotras, más risueñas,
comenzáis ripios enormes.
(Nos jalamos de las greñas,
o estaremos conformes)
Echemos pues esas leñas,
valientes como toreros,
hasta volvernos las dueñas.
Hablemos, sin ser austeros,
de Leires, Blancos y Trillos,
de Rajoys y Zapateros
de tinglados y de pillos,
de bellacos, marrulleros,
de Aznares y de Carrillos,
de inutilidad y milperos,
de caviar y solomillos
y de vacíos calderos.
De bragas y calzoncillos,
e incluso de chaqueteros,
de curas y monaguillos
y de burkas o sombreros,
de pandillas y pitillos
de ladrones y troleros…
de Bibianas con zarcillos
de divorciados, solteros,
de Pantojas... con pelillos,
de jueces y bandoleros,
de comadreo y corrillos
y de justicias sin fueros.
Os dejo la componenda
y ya con esto concluyo,
espero que se comprenda
que ya me vaya. No huyo.